Si congelas óvulos, automáticamente dejas de ser chico...

Como había dicho ahí atrás, hoy iba a venir la que es mi supuesta mejor amiga a visitarme. Efectivamente, vino. Vimos una película (la mar de rara, por cierto…) y charlamos de banalidades. Le comenté si se había descargado a través de un link que le pasé por WhatsApp una App que le recomendé y me dijo que no había sido capaz y me tendió su móvil para que lo intentara yo y ella se fue al baño. Abrí el WA para acceder a nuestra conversación, pero al hacerlo me salía en pantalla la última conversación suya (con su mejor amiga), iba a cerrarla cuando sin querer -mal, lo reconozco- leí la palabra adopción seguida de burlas. No me pude contener y leí las últimas líneas -mal, sí-. 

-El resumen sería así:

Ella diciéndole a su mejor amiga el proceso que estoy viviendo actualmente de manera soez, poco verdadera, burlona y muy mala… y su señora amiga (que tiende a despotricar de mi muuuuuy a menudo cuando ni siquiera me conoce ni me vio en su vida) diciendo que si ella misma quisiera tener un hijo y no pudiera (por ser infértil o cualquier otra circunstancia); adoptaría, y que porqué no lo hago yo (¡la adopción en España para gays no es legal cacho listas! :D). También comentaban que si llevaba pinchándome estrógenos 3 meses era porque soy una chica (me tuve que pinchar estrógenos como una semana, pero bueno… ellas a lo suyo) y me gusta hacer cosas de mujeres, y que si yo fuera un hombre de verdad (dato: hay hombres de mentira) repudiaría de mis óvulos 100% y no querría hacer nada con ellos para ningún fin.

¿Saben ellas a caso lo mucho que deseo yo tener un bebé…?, ¿saben ellas a caso la lucha constante que supuso para mí, mentalmente, cada ecografía?

Me sentí tan mal, tan sucio, tan asqueado de la sociedad de mierda que estamos criando… son chavalas de 20 años que piensan mucho peor que mi abuela a sus 80 recién cumplidos. 

¡¿Por qué narices tengo YO que repudiar de algo mío?! Mis óvulos son míos, yo nací con ellos. No los pedí, pero están ahí, ¿por qué odiarlos y odiarme en vez de aprender a vivir feliz con ellos?

Comentan eso, sí, pero bien que no se atreven a comentar cómo debo sentirme a sabiendas de que no tengo esperma como para inseminar a una mujer y tener un bebé. No comentan lo duro que es, para mí como hombre, no saber lo que se siente ni siquiera al mear de pie. ¡No!, ¿para qué vamos a ser empáticas? ¡que eso no está de moda! Comentan que soy una chica porque congelo mis ovocitos para ser papá algún día, de una manera burlona y muy falsa y ya está. Se ríen a carcajadas de mí y punto. Y después, ella se presenta en casa tan feliz -y tan falsa- y yo me callo porque se me aprieta un nudo en el pecho y no me sale articular nada al respecto y cuando se va le digo que me avise cuando llegue (¿por qué narices soy así?), y cuando baja la saludo desde el balcón, por impulso, como lo haría un niño de cinco años que perdona rápido a su mamá cuando esta le niega una chocolatina. Y claro que me arrepiento de ser después bueno, claro que sí. Porque sé que ser bueno no es nada malo, pero sí que es malo que te tomen por tonto y uno debe hacerse respetar en algún momento de su vida. ¿Cómo voy a ser yo papá algún día si dejo que me pisen como quieran? ¡Es que no lo entiendo!, ¡me resulta tan falso, tan hipócrita que después me pregunte si estoy bien cuando a la vez se ríe de mí, en mi cara, con su amiguita!

En Septiembre de 2012 (un mes antes de que empezara mi terapia de re-asignación hormonal) pasó algo similar y descubrí que se reían de mí. No comprendo todavía, a mis 19, porqué continúo al lado de amistades vacías, negativas y que no aportan nada bueno a mi vida, no lo entiendo de verdad… Estoy deseando ser licenciado en psicología pronto y a ver si así me entiendo mejor y encuentro el porqué a mi manera de ser; tan tonta, tan parada.

Esto es parecido a algo que leí el otro día en un Blog. La gente tiende a decirte cómo lo harían ellos, porque son mejores y más listos que tú sin saber un ápice sobra nada. La gente es así.

Sé que lo que hice está mal, que en realidad invadí la privacidad de alguien (no soy así), pero fue abrir la App y ante mis narices leer la palabra adopción seguida de burlas. Y no me pude contener, tengo todo este tema demasiado presente estos días, actué por impulso y estoy seguro de que no sería el único que hiciera esto -por muy mal que esté, que lo sé-.

De verdad, animo a todos los que no me conozcáis a que leáis aquí mi historia, a que os probéis mis zapatillas unas semanas para caminar con ellas y a que viváis y sintáis lo mismo que yo, y después, justamente después: os daré libertad plena para juzgar de cualquier manera.

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Actualizo la entrada y os dejo aquí esta noticia en La Voz de Galicia.